
Luz del poder divino, celestial merezco tu mirada. Adoro de ti, tu calor, tu rostro y hasta tus pisadas. Quiero tenerte..., merecer y ser iluminada.
Entre este mar de tinieblas.
Que se quiten mis desdichas y se busque con palabras.
-Para así poder tenerte y verme en ti reflejada. Dios me quite esta ceguera. Yo lo espero con mi alma.
Gracias a usted Doctor.
ResponderEliminarPreciosa poesía. Escrita con pasión y sentimiento.
ResponderEliminar